En este Mundial he notado que multitud de aficionados, pintados de pies a cabeza, con tambores, con la playera y bandera bien puestas, y el pulmón a todo lo que da, asisten a los estadios para alentar a sus equipos con vehemencia y convicción totales.
Eso se manifiesta en dos síntomas principalmente: a) se desgarran la garganta al gritar ¡Goooool! cuando su equipo anota, o bien, b) lloran intensamente cuando es derrotado. Esto me recuerda mucho a la peli de Hooligans, en donde los conflictos entre aficionados ingleses son cosas de todos los días.
Me parece que el común denominador es la pasión que sienten por ser miembros de algo, por pertenecer a un mismo deseo o simplemente por buscar pleito. No importa mucho el fin pero… La razón es la pasión, ¿no es así?
En muchas pelis o telenovelas es común que mil hombres anden detrás de una mujer, y siempre es esta mujer la que desatará en ellos una desmedida pasión que probablemente los conducirá a la perdición porque, admitámoslo, así es esto de los líos de faldas. ¡Ah que mujeres tan fatales que embaucan a muchachitos inocentes! Pero como ya me ando saliendo del tema, regreso a lo de la pasión.
Sí, hay que sentir pasión, no importa si es por algo o por alguien. Algunos son apasionados sexualmente, otros con su trabajo, y algunos más con el arte, como la música, por ejemplo. Algo así es lo que narra la peli del Violín Rojo, la cual es la razón principal de este post que parece no tener ni pies ni cabeza.
El Violín Rojo es el objeto de pasión de muchos, pero pocos son los que pueden disfrutar de sus encantos. Puede atraer infinito placer a quien lo posee, pero también puede llevarle total desventura (igualito que la mujer fatal de las pelis de Cabaret). Aquél violín es un objeto sin igual, es perfecto: conjuga una inexplicable belleza, la intensidad de su color sangre, y un hermoso sonido que habita en sus cuerdas.
Este violín cuenta la historia de aquellos que se sometieron a su hechizo musical, y todo lo que ocurre en sus vidas y que es provocado por la obsesión de poseerlo. Esta peli es una historia que cuentas muchas historias a través de un mismo objeto: un violín, que es mucho más que eso, pues un objeto cobra valor a partir de la significación que se le da, social o individualmente.
Esta peli enlaza diversas historias a partir de la predicción del futuro del protagonista inminente. En definitiva es una historia de pasión, de magia, del paso del tiempo, de cambios en el mundo, de obsesiones y amores y, en esencia: de la larga vida de un violín. Chéquenla.
pd.- les dejo el link de esta escena que está de... diez, porque la inserción está desactivada :(
Comentarios